A orillas del rio Piedra me sente y llore

Hay dias que siento un deseo irrefrenable de escribir…..y a veces me pregunto, por qué escribo tanto? Llevo escribiendo tantos años….casi desde que tengo uso de razón…soy de las que tenia un diario de adolescente, de las que se emocionaba escribiendo cartas de amor, de las que cuando tuve mi primer ordenador, lo llenaba de paginas en Word escritas con cien mil pensamientos….y lo sigo haciendo… y lo sigo necesitando.

Me es tan fácil transcribir lo que siento, lo que pienso, lo que deseo….mis dedos al teclado y mis pensamientos van al unísono….y mis sentimientos se van plasmando en algo tan bello como las palabras…esas palabras que tienen el doble filo de quedar grabadas y no poder desdecirlas….llevo mucho, mucho tiempo escribiendo, escribiendo mi historia…quizás emulando a la protagonista de aquel libro de Paulo Coelho “A orillas del rio Piedra me sente y llore”, quizás cuando acabe mi libro, me siente a las orillas del Guadalquivir e igual que un dia arroje allí algo del pasado como símbolo de una nueva vida, quizás arroje allí las paginas de una historia que sino ha sido la historia de toda mi vida, sí ha sido la gran historia de mi vida…aquella historia que nunca tuvo un final escrito, que siempre tuvo esa ultima pagina en blanco….hasta que se escribió….curioso…la ultima vez que estuve en Sevilla fue para pedir un principio a La Macarena y seguramente cuando vuelva será para poner un final… cómo un mismo lugar puede ser principio y fin…cómo ir suplicando el milagro de hacer realidad un sueño para luego suplicar olvidarlo porque no es posible…la serendipia…esa puñetera serendipia que nos hace conocer lo increíble y lo soñado para luego no permitírtelo tener….pero como en la carta de Shakespeare “Aprenderás que no importa en cuantos pedazos tu corazón se partió, el mundo no se detiene para que los arregles.” Asimismo, pasa otro tren, que aunque no es el mismo, tiene el mismo destino, y ese lugar es el lugar que siempre has deseado ir y es tu felicidad….admitir que la felicidad la construye uno mismo y en mi mano está el construirla o quedarme llorando y añorando lo que no pudo ser y decidir….. y decido!! decido construir un futuro y seguir adelante, no se detendrá el mundo porque yo recogeré mis pedazos y los arreglare y mi corazón se recompondrá y volverá a latir, a sentir, a vibrar….seguire escribiendo y un dia a orillas del rio Guadalquivir me sentare y llorare…